Por Alfonso Ramírez

Alianza News

San José.- El pasado 11 de agosto, un grupo local activista autónomo llamado Boinas Cafés de San José (San Jose Brown Berets), lanzaron una petición para remover del Palacio Municipal (San Jose City Hall), la estatua del controversial navegante, considerando que representa una ofensa para la comunidad en general, pero en especial para las comunidades descendientes de aquellos nativos americanos que fueron esclavizados ultrajados y masacrados bajo el mandato del “descubridor del Nuevo Mundo”.

“Este movimiento no es sólo nuestra forma de retribuir algo a nuestras comunidades nativas, esto es retibuirnos a nosotros mismos y a los jóvenes que vienen después de nosotros”, dicen los Brown Berets en un comunicado..

Los miembros de éste grupo de activistas han tenido reuniones y pláticas por diferentes medios con funcionarios del gobierno municipal de San José, incluyendo el Alcalde Sam Licardo, quien finalmente ha aceptado que la estatua sea removida del Palacio Municipal para ser reubicada en el Parque Histórico de San José (San Jose History Park).

Aún no se ha dado una fecha exacta por parte de la alcaldía, pero la estatua de Cristóbal Colón o Cristóforo Colombo, como es conocido por la comunidad italiana, o Christopher Columbus, como se le llama en el mundo anglo, será removida del City Hall de San José gracias a la unión, organización y perseverancia de un grupo de personas que al igual que muchos de nosotros, está en contra de la injusticia social y la segregación racial, demostrando así que la comunidad, cuando se lo propone, mustra su poder, un poder que pude crecer hasta donde nos lo propongamos.

En nuestro continente, América, la imagen de Cristóbal Colón ha sido venerada por muchos, básicamente gracias a las clases de historia que recibimos en nuestras escuelas, donde regularmente nos han enseñado que dicho navegante de origen italiano, fue un intrépido héroe, quien en Agosto de 1942, partió de España a bordo de tres barcos llamados “La Niña”, “La Pinta” y “La Santa María”.

El objetivo era llegar a las costas de la India, pero en su lugar, el 12 de Octubre de 1942, arrivó a lo que hoy se conoce como el Continente Americano.

Lo que aparentemente olvidaron enseñarnos en nuestras escuelas fue que el señor Colón, durante dicho “descubrimiento” cometió una interminable serie de atrocidades, tales como asesinatos, violaciones y privaciones de libertad entre muchas otras, como el fraile Bartolomé de las Casas, describió en varios de sus escritos.

Fray Bartolomé, quien fue prácticamente el primer europeo en abogar por los derechos de los nativos del Nuevo Mundo, y que acompañó al Colón en uno de sus viajes, asegura que entre las barbaries que el colonizador realizaba para obligar a los nativos a cumplir su cuota individual de oro extraído de las minas, se incluía mutilar las manos y orejas de los esclavos que no cumplian con la cantidad establecida, dejándolos desangrar hasta morir.

Según los historiadores, Cristóbal Colón fue aprehendido, juzgado y encarcelado por sus multiples crímenes cometidos en el “Nuevo Mundo” contra las pacíficas y amigables tribus indígenas que habitaban las islas donde desembarcó en aquella época.

Hoy en día, muchas organizaciones y comunidades indígenas y latinas buscan terminar con el mito del “héroe” Cristóbal Colón y mostrar de una vez por todas las verdades escondidas detrás del susodicho “Descubrimiento de América”.