Proponen que estudiantes que viven al sur de la frontera con México puedan estudiar en los colegios comunitarios fronterizos de California pagando las mismas colegiaturas que los alumnos locales.
La iniciativa fue presentada por el asambleísta demócrata por San Diego, David Álvarez, ante la Asamblea Estatal (Cámara Baja) de California, quien argumentó que “vivimos en una región binacional en la que ayudar a un lado de la frontera nos ayuda a todos”.
La propuesta AB9, presentada en enero por David Álvarez, favorecería a los estudiantes estadounidenses o mexicanos que viven dentro de las primeras 45 millas (72 kilómetros) desde la frontera entre California y México para que se les aplique la misma colegiatura que pagan los residentes del Estado Dorado en alguno de los planteles de la Asociación de Colegios Comunitarios de los Condados de San Diego e Imperial.
La otra condición que propone el asambleísta, hijo de inmigrantes trabajadores mexicanos que creció en el barrio latino Logan de San Diego, es que esos estudiantes sean de familias de bajos ingresos económicos y lo demuestren.
El asambleísta propone que los estudiantes transfronterizos tengan todos los beneficios que tienen los alumnos locales, como tomar dos años de clases que automáticamente revalidan los sistemas de universidades de California, para después graduarse como profesionales con título universitario en sólo dos años más de estudios.
El legislador demócrata dice que “vivir en las Californias significa que vivimos en una región fronteriza dinámica, donde necesitamos educar más estudiantes que asuman puestos de trabajo para el crecimiento regional”.
Si la propuesta es aceptada, reducirá hasta en 81 % el costo de la matrícula, que ahora resulta inalcanzable para muchos estudiantes que radican en México y quisieran prepararse en California.
Según datos de los Colegios Comunitarios de California (CCC), la matrícula por el año escolar 2023 para estudiantes que residen en California es de 1.246 dólares anuales, mientras que la tarifa para los no residentes en el estado es de 6.603 dólares. En los colegios privados el costo promedio es de 20.540 dólares anuales.
La propuesta de Álvarez, que tendría una vigencia inicial de cinco años, “es un paso significativo de justicia social para los estudiantes transfronterizos”, comentó la doctora en educación Vannessa Falcón Orta, del campus de la Universidad Estatal de San Diego en el Valle Imperial, una región agrícola en la que más del 95 % de la población es latina y vive indistintamente en uno u otro lado de la frontera.
Falcón advirtió que las principales razones por las que los estudiantes transfronterizos desarrollan vidas paralelas en ambos lados de la frontera al vivir en México y estudiar en California son las dificultades económicas, la inseguridad de vivienda y la deportación de un familiar.
La propuesta de Álvarez complementa la ley SB257, que firmó en 2017 el entonces gobernador Jerry Brown y permite a los menores de edad, hijos de padres deportados al estado mexicano de Baja California continuar sus estudios de preparatoria en escuelas de California, ahondó Falcón.
Álvarez señala que su iniciativa también beneficiaría el futuro económico de la frontera de California. (Con información de EFE)