En el Centro de Detención del condado de Baker (BCDC) de Florida regentado por el Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE) de Estados Unidos, un grupo de inmigrantes indocumentados inició una huelga de hambre en protesta por «las amenazas de confinamiento solitario».

La Unión Estadounidense de Libertades Civiles (ACLU) de Florida informó que la huelga de hambre se produjo también por la escasa alimentación que reciben, con comidas que consisten solo en «una cucharada de carne, frijoles y zanahorias».

Se debe recordar que en este centro de detención, ubicado en el extremo noroeste del estado de Florida, anteriormente ya se habían denunciado situaciones de supuesto abuso y maltrato.

La cantidad de comida proporcionada en el centro de detención de Baker y las represalias de los guardias violan los Estándares Nacionales de Detención (NDS) de Estados Unidos, al «no cumplir» con el nivel de comidas sustanciales y nutritivas que establece el Gobierno, subraya Amy Godshall, abogada de derechos de inmigrantes de la ACLU de Florida.

«Baker tiene una larga historia de proporcionar alimentos insuficientes, no comestibles y sin valor nutricional». Así, en septiembre de 2022, la ACLU de Florida presentó una denuncia federal contra la instalación, describiendo múltiples problemas, incluido el de personas a las que «se les sirve comida podrida, mohosa, cruda y que contiene insectos».

«Durante años, una y otra vez, hemos visto a la oficina del alguacil del condado de Baker negar a las personas en las instalaciones un tratamiento humano básico y violar varios requisitos federales», acotó Godshall.

La abogada de ACLU recordó que es responsabilidad del centro «proporcionar suficiente comida a las personas bajo su cuidado y mantener un ambiente libre de amenazas de represalias cuando los individuos defienden sus necesidades básicas».

Según la base de datos de detención de inmigrantes de Florida, se han presentado al menos 191 quejas por múltiples violaciones en Baker, «incluyendo negligencia médica extrema, voyerismo y abuso sexual, condiciones insalubres», entre otras, añade Amy Godshall.

Varias organizaciones a favor de los derechos de los inmigrantes han pedido el cierre del Centro de Detención de Baker, operado por la oficina del alguacil del mencionado condado a través de un contrato con ICE. (Con información de EFE)