Tras los últimos tiroteos masivos ocurridos en Estados Unidos y para reforzar el control de las armas de fuego, el presidente de Estados Unidos, Joe Biden, rubricó este fin de semana el acuerdo votado por el Congreso que restringe mínimamente el acceso a las armas.

Biden después de firmar el documento expresó «con permiso de Dios, esto ayudará a que se salven muchas vidas»; también tuvo palabras para las familias de las víctimas de violencia con armas de fuego, a quienes reconoció haber guiado el camino para llegar hasta la fecha de hoy.

Como se sabe la Cámara de Representantes de este país aprobó la medida por 234 votos a favor -todos los demócratas más 14 republicanos- frente a 193 en contra, y lo hizo en la fecha en que se cumple un mes de la matanza de Uvalde (Texas), donde un joven mató con un rifle semiautomático a 19 niños y dos profesoras en una escuela de primaria.

La ley incluye una revisión del proceso de compra de armas para los menores de 21 años y extiende a todo el país las llamadas leyes de «alerta de peligro» («Red Flag»), que permiten activar un procedimiento legal para confiscar las armas de fuego de quienes representen un peligro para terceros o para sí mismos.

Además, busca acabar con lo que se conoce como «el vacío legal del novio», por el que hasta ahora si alguien es acusado de violencia doméstica sin estar casado, se le permite seguir teniendo armas en propiedad, algo que no ocurre en el caso de las personas casadas.

Al margen de restringir ligeramente el acceso a las armas a determinadas personas y en según qué circunstancias, el acuerdo entre demócratas y republicanos incluye más fondos para recursos de salud mental y para reforzar la seguridad en las escuelas, dos aspectos en los que insisten los defensores de las armas cada vez que hay un tiroteo en EE.UU.

El suceso de Uvalde del pasado 24 de mayo estuvo precedido por otro tiroteo masivo en un supermercado de Búfalo (Nueva York), esta vez por motivos racistas, en el que un joven blanco asesinó a diez personas.

Nada más producirse la matanza de Uvalde comenzaron las negociaciones que han llevado a este proyecto, que fueron encabezadas por el senador demócrata Chris Murphy y el republicano John Cornyn, con el apoyo de los líderes de ambos partidos en el Congreso.

La aprobación definitiva en el Congreso se produce un día después de que el Tribunal Supremo de Estados Unidos, de mayoría conservadora, ampliara el derecho a portar armas al avalar que se puedan llevar en público. (Con información de EFE)