Ante la llegada masiva de inmigrantes ilegales al estado de Florida, la vicegobernadora, Jeanette Núñez, anunció que contempla enviar migrantes al estado de Delaware, siguiendo el ejemplo de otros estados conservadores como Texas y Arizona, que han estado transportando estos indocumentados a Washington y Nueva York.

Núñez explicó que el gobernador Ron DeSantis no se iba a «quedar de brazos cruzados» y «los va a enviar francamente a Delaware, el estado del presidente» Joe Biden.

«Es una irresponsabilidad de parte de Biden y de toda su administración el no lidiar con el problema», aseguró en respuesta a una pregunta sobre inmigración ante la ola de balseros cubanos que están llegando al estado.

«Esto va a ser peor que el Mariel», aseguró la vicegobernadora en referencia al éxodo masivo de 1985 en el que llegaron miles de cubanos a Florida.

Las declaraciones de la vicegobernadora, de origen cubano, sin embargo han generado críticas de la comunidad migrante estatal, en su mayoría cubanos, en momentos en que la península enfrenta en los últimos días la llegada masiva de estos ciudadanos en varios grupos y cada vez más numerosos.

En ese sentido, la exjefe de prensa del gobernador DeSantis, Christina Pushaw, quien ahora trabaja para la campaña de reelección del republicano, dijo que Núñez fue malinterpretada.

Según Pushaw, la vicegobernadora aseguró que «claramente que aquellos que vienen ilegalmente deben ser transportados fuera de Florida, sin importar de dónde provengan».

Pero, «si alguien vino a Miami en balsa desde Cuba para escapar de la represión comunista, esa persona es refugiado legal», agregó Pushaw.

El Partido Demócrata señaló que se trata de políticas inhumanas y que «sacar a los inmigrantes de Florida en autobús» afectaría a todos los inmigrantes, incluidos cubanos, venezolanos, colombianos y haitianos.

APOYO A MIGRANTES

La Federación Hispana, una organización de apoyo a los latinos en Estados Unidos, ha creado un fondo dotado inicialmente con 100.000 dólares para los grupos comunitarios que están dando ayuda a los inmigrantes y solicitantes de asilo que el Gobierno de Texas está enviando a Nueva York.

Se espera que el dinero permita continuar ofreciendo cobijo, alimento, ropa, atención médica y transporte a estas personas que están llegando a la Gran Manzana, en su mayoría de países latinoamericanos.

«Merecen ser tratados con respecto, dignidad y compasión cuando llegan a nuestro país», señaló en la nota Frankie Miranda, el presidente de esta organización sin ánimo de lucro.

Este miércoles llegaron a Manhattan cuatro nuevos autobuses con decenas de inmigrantes desde Texas, que en las últimas semanas ha enviado a Nueva York a miles de personas desde la frontera con México.

Además de ayuda material, la Federación Hispana explicó que está dando asistencia legal a los recién llegados para que puedan gestionar sus casos ante las autoridades migratorias. (Con información de EFE)